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Antiguo 04-02-2015, 10:51:33   #1341
pairospam
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Predeterminado Re: Merkabah: de tolva a motorhome

Luego de algunos cortes, semi-cortes, dobleces y empujones la semi-caja calzaba perfecto en el travesaño curvo de Repuesto. Solo esperaba que ambos travesaños fuesen idénticos.




Cuando puse el winch en su lugar para hacer unas comprobaciones pareció que la caja estuviese echa de papel y no de acero. La vocecita inquisitiva se hizo más fuerte, y la idea de hacer refuerzos empezó a tomar fuerza. Debía acaso hacerlo todo de nuevo?



Decidí que dejaría la caja tal cual y que la reforzaría, así como reforzaría el perfil de soporte al cual iría apernada. Algunas pequeñas piezas y secciones de perfil y una buena soldadura y debería de ser capaz de aguantar las fuerzas a las que a lo mejor jamás se enfrentaría el winch. Usé pedacitos de fierro que encontré en todos los rincones del taller porque me daba una lata tremenda salir a morirme de calor a buscar fierro a la barraca o donde Verardo.

Usaría además otro perfil de 5 mm como refuerzo, al que también le volé una franja para no topar el radiador. Corté y pulí también las piezas a soldar para reforzar el soporte del winch, varias de ellas, y la gente del taller empezó a lanzar unas miradas poco amistosas, debidas seguramente a mi insistencia en usar el ruidoso esmeril durante toda la tarde.




Cuando llegó el tiempo de soldar estaba feliz; me encanta soldar. Me aseguré de conservar alineación y perpendicularidad para tratar de que todo saliera perfecto, o al menos hacer el intento. Soldar trozos gruesos es mucho más fácil y rápido y divertido así es que fueron unos buenos momentos, aunque el calor de la soldadura no hizo más que agregar sufrimiento al torturante calor ambiental.




Al momento de partir, como ocurre siempre que uno está entretenido, el producto de horas de trabajo quedó inerte sobre el banco, oxidado y aparentemente inútil. Eso cambiaría luego.



Siguiendo el consejo de un tipo de Alemania, fui y compré unos discos especiales para remover pintura y óxido del acero. No los había pescado antes porque el único que había visto era de marca Bauker, y ya había tenido muchos problemas con esa marca china antes. Encontré unos marca 3M para taladro y también me traje un par. Pero la verdad es que estos discos, llamados CSD-discs, son bien abrasivos y su duración mayor de lo que esperaba, y para remover la pintura andaban a todo popó.


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Antiguo 04-02-2015, 11:00:41   #1342
pairospam
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Predeterminado Re: Merkabah: de tolva a motorhome

No solo andaban bien para sacar la pintura sino también para sacar el óxido, incluso aquel del maltrecho soporte del tapabarros. Bien.



Un cálculo a vuelo de pájaro y necesitaría al menos tres días completos para despintar todo el resto de la cabina, y al menos cinco para limpiar lo que quedaba por limpiar del chasis del camión, o quizás un poco más. Claro que necesitaría dedicarme por completo a una sola tarea y no picotear por aquí y por allá como lo estaba haciendo ahora. Probablemente necesitaría trabajar solo, los fines de semana, para no perturbar el trabajo del taller con el ruido y el polvo. Hmm… y quizás mataría al pobre esmeril angular, tan abusado ya.

Decidí terminar con el cuento del winch y luego seguiría con la cabina. Una vez la cabina estuviese limpia de pintura y óxido la imprimaría con wash primer y la dejaría así para luego trabajar en la reparación de las abolladuras y los defectos de la chapa. Ojalá y en el intertanto encontrase a alguien que hiciera esa pega.

Entonces, continué con mis afanes del winch, usando cada pedacito de fierro que encontré cerca de la Merkabah. El metal brillaba una vez pulido con los discos ad hoc, y yo esperaba que la geometría y la soldadura hicieran lo suyo para mantener en su sitio al winch cuando se usara.






Como se mencionó en precedencia, varias veces, cualquier pedazo de fierro puede servir para completar un repuesto, un suple o una obra de arte. Es solo cuestión de largo por alto por ancho, no de ubicación; eso da lo mismo.




El winch es un pedazo de fierro bastante pesado y, por estar tan cerca del radiador, apernarlo a la caja y al soporte transversal desde abajo resultaría imposible. Tuve que cranear todo un procedimiento, paso a paso, para poder montar tanto la caja como el winch y luego la tapa. Se requeriría de dos personas, a lo mejor solo una, con una cuerda y un par de roldanas y un montón de paciencia.



Ese sábado en particular no tuve ganas de trabajar en el taller con el calor que hacía, así que me la pasé pensando en la Merkabah y los múltiples pasos a seguir. Fuimos a pechar piscina donde unos parientes para sacarnos el calor de encima, y funcionó.

Domingo por la mañana, y un calor indecente amenazaba con derretir todo el valle del Aconcagua. Sin embargo, salí igual a andar en moto por los cerros. Los senderos estaban extremadamente secos, resbaladizos y rocosos, y el sol y el esfuerzo me hacían sudar como caballo, pero la ágil Yamaha se comportaba como una gatita obediente y sentía que mis habilidades de endurear estaban mejorando cada vez más. Fue un momento glorioso, hasta que pinché la rueda trasera. Plop. Justo en la cresta de la loma, a varios kilómetros de San Felipe y, adivinen… olvidé echar a la mochila la lata de espuma para pinchazos. Plop. Plop.



Estaba demasiado cansado y sudado como para enojarme conmigo mismo así que me encogí de hombros, me reí un poco y dije algo gracioso para el registro. Tomé un largo sorbo de agua de la botella que sí había llevado en la mochila y llamé a Carmen para avisar que a lo mejor me iba a demorar para el almuerzo. Ella no se rió.



Como esperaba, otro entusiasta solitario no tardó en pasar por ahí, un tipo más joven y con mucho más experiencia que yo, que casi volaba sobre las piedras, y me alentó a seguir con la rueda desinflada poniendo cuidado en no golpear las rocas grandes. Me acompañó en el descenso de la montaña mostrándome algunos senderos menos rocosos (¡!). Le agradecí un montón y me las ingenié para llegar a casa, pero llegué destruido por el esfuerzo de llevar todo el peso en la rueda delantera y de tratar de controlar la moto en los senderos escabrosos con el neumático chicloso detrás. Eduardo estaba listo para salir a auxiliarme en su Yamaha 400, sin ninguna posibilidad de llegar adonde estaba, pero iba a ir igual. Gran tipo, mi cuñado.

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Antiguo 04-02-2015, 11:14:08   #1343
pairospam
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Predeterminado Re: Merkabah: de tolva a motorhome

Lunes por la tarde, otra vez. Continuaba pensando y fabricando los soportes de la caja del winch delantero, tarea que se había prolongado increíblemente en el tiempo. Era el momento de taladrar. Oh cresta… me carga hacer hoyos! Por la mañana encargué un taladro de pedestal de tamaño mediano para hacer los agujeros de más de 13 milímetros, pero lo entregarían en una semana, más o menos, así que daba lo mismo. Tenía que empezar ya.

Medí y requetemedí todo de nuevo y empecé con los agujeros básicos para apernar el winch a la caja de modo de poder situar los demás hoyos para apernar la caja al soporte y así con todos los demás agujeros, ad nauseam.



Dije que iba a ser imposible apernar el winch desde abajo a la caja por la proximidad del radiador, pero ni siquiera iba a poder acercarme porque los caballetes y los troncos que sujetaban el chasis de la Merkabah bloqueaban completamente el paso. Si quería hacer las cosas bien tenía que sacar esos obstáculos y liberar el paso para poder probar y marcar la situación del winch in situ.




Modifiqué ligeramente los soportes de cuatro patas que fabriqué hace un par de años y los puse debajo de los largueros del chasis, sin problemas. Los fierros se retorcieron y rechinaron un poco ante la fuerza de la poderosa gata hidráulica española, pero solo fue una leve protesta bastante floja. Los troncos y los caballetes volvieron a ser parte del caos que rodea la Merkabah.



Tuve ciertas dificultades para sacar y reemplazar los pernos que afirmarían el soporte transversal del winch al chasis ya que estaban pegadísimos por el óxido de los siglos y no pude probar cómo quedaba la caja para seguir haciendo mediciones y hoyitos. Los rocié con suelta-pernos y me dediqué a hacer el calado a la plancha superior de la caja para alojar el refuerzo trapezoidal del tiro frontal del camión.

Era algo tarde y ya había sonado un par de reclamos así es que rápidamente corté, relocalicé y soldé el pedazo de fierro mientras Carmen terminaba con sus cosas en la oficina. Fuimos a tomar un café con un pastelito a un agradable negocio del centro. Estaba aún caluroso a las diez de la noche.

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Antiguo 05-02-2015, 13:42:25   #1344
houndour
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Avatar de houndour
 
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Predeterminado Re: Merkabah: de tolva a motorhome

genial genial!! mientras leía me acorde del quita pintura, pero más adelante conseguiste uno y llegasta a una mejor solución.

geniales los avances, ya son más notorios.


saludos!!
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Antiguo 05-02-2015, 20:35:19   #1345
1000TON
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Thumbs up Re: Merkabah: de tolva a motorhome

genial la historia amigo

la sigo de hace un tiempo

y el fin de semana pasado

me acorde de tu proyecto al ver un camion gigante en bahia inglesa

acampando

saludos y fuerza para que siga el animo
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Antiguo 10-02-2015, 14:56:21   #1346
pairospam
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Predeterminado Re: Merkabah: de tolva a motorhome

Gracias houndour y 1000ton por los saludos. Siempre son bienvenidos

Y bien… en menos tiempo del pensado llegó un paquete grande y pesado. Había sucumbido a la tentación transformada en necesidad, o viceversa, de tener un taladro de pedestal propio para hacer hoyitos con más facilidad en el fierro, sobre todo para los agujeros de más de 13 mm. Si… lo sé; la marca no es de mis amores pero las alternativas eran escasas.



Armé el taladro en los ratos que me quedaban entre fierro y fierro, y la verdad es que no se veía ni sentía taaaan mal. Siempre había querido tener uno.



Y el cuento del winch siguió su curso, con muchas pruebas in situ para evitar tener que lamentar errores de la posición de los pernos y otros problemas asociados al hacer las cosas al ojímetro. Claro que poner y sacar fierros a cada rato tiene su precio y mi espalda y mis brazos tuvieron que pagarlo. Particularmente pesada se puso la caja del winch cuando la tuve que colocar por quinta vez en su lugar para confirmar unas mediciones y comprobar lo equivocado que estaba en otras. Todo lo disponible para mantener el pesado fierro en su lugar, palitos, fierritos, era aceptable.




Trozos de fierro ya usados varias veces sirvieron de donantes para completar la obra del travesaño de soporte del winch. Corta, limpia, suelda, esmerila… lo típico. Y vamos pasando las horas en eso.




Tantas fotos, tanto tiempo y tanto polvo le pasaron la cuenta a la pobre cámara y un día se negó rotundamente a funcionar. No hubo caso de que el lente se desplegara, bloqueado quizás por cuánta mugre. La llevé de inmediato al servicio técnico confiado en que solo necesitaba una desratización y la chica del mostrador me devolvió una mirada no tan confiada que me hizo dudar de mi diagnóstico. Dentro de una semana se vería. Hmm…

Seguí sacando fotos con el teléfono así que disculparán si no salieron muy bien.

Los primeros agujeros hechos por el nuevo taladro fueron bastante complejos, como sucede siempre que uno no conoce bien el instrumento y cuando el fierrito es mucho más largo que la prensa de soporte. Pero al final la voluntad prevaleció y el travesaño, luego de algunas modificaciones y retoques, quedó listo para apernarlo al chasis y a él apernarle la caja con el famoso winch. Listo, creía yo.




Y entonces más agujeros, monta y desmonta la caja, más agujeros, más pruebas. Prefería hacerlo varias veces a equivocarme una sola, y aunque se hacía pesado por cansancio, cada vez se hacía técnicamente más fácil colocar y desmontar la caja con tanta práctica.



Una vez estuve seguro de cómo se haría todo y de las dimensiones y la forma de la caja, y cuando me dio lata seguir cortando pedacitos de fierro, agarré la MIG y soldé de una vez las placas de la caja. Para evitar deformaciones hay que ir soldando por segmentos alternos, de un lado y otro, pero desgraciadamente eso no contribuye a que quede pareja la soldadura. Al final no quedó tan mal, y la fineza era trabajo que le fue encargado al esmeril.


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Antiguo 10-02-2015, 15:20:57   #1347
pairospam
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Predeterminado Re: Merkabah: de tolva a motorhome

Unas cuantas maniobras y cortes más para completar la pestaña delantera superior y ya había que pensar en la tapa. Para ello puse el winch en posición, una vez más y para no equivocarme, y medí todo de nuevo. La idea era de usar un trozo curvo del refuerzo interior del chasis de Repuesto y soldar dos trozos nuevos de plancha de acero para hacer la tapa pero, escudriñando por entre las cajas y los pedazos de fierro desparramados, encontré que un trozo más completo de chasis interior podría ser la solución ideal, no importaba que estuviese perforado por un lote de agujeros ya que todos menos uno coincidían con los pedazos que había que cortarle para que las partes prominentes del winch se asomaran. Así, además, habría que soldar una sola placa.





Cortar, recortar, ajustar, taladrar hoyos, soldar tuercas y otros fierros, limpiar, esmerilar y confirmar que todo esté bien. Luego de varias horas la caja tenía tapa. Resultaba difícil de creer que una cosa tan simple como una caja de metal para contener el winch pudiese tomar tanto tiempo para su fabricación artesanal, pero luego recordé lo que me había demorado en construir cada una de las piezas inventadas para la Merkabah; era siempre la misma historia y siempre la misma queja. En fin…



Sabiendo que iba a ser necesario recortar formas curvas en la tapa, había encargado hacía algunos días a una conocida ferretería en Santiago una caladora ad hoc bien potente, y compré en una tienda local las mejores sierras de caladora para metal que encontré.

Bueno, llegó el momento de tener que recortar la tapa y la caladora no llegó. Como no tenía muchas ganas de perder el poco tiempo disponible para concretar avances, agarré una caladora casi de juguete que había comprado hacía como diez años por unas pocas lucas y le coloqué las sierras. Pensaba que la iba a fundir al primer centímetro de corte, pero manejándola muy suavemente aguantó con estoicismo el esfuerzo sin recalentarse mucho siquiera. Bien.



Estaba en eso, casi al terminar la jornada, cuando aparecieron Frieder e Irmi, una pareja retirada de viajeros alemanes que hacía un par de años andaban recorriendo el mundo en su Mercedes 1017 de 1982. Habíamos quedado por correo electrónico que llegarían al día siguiente pero anduvieron más rápido de lo previsto, lo que les venía de perillas porque su barco de vuelta al viejo continente zarparía dos semanas antes y tenían poco tiempo para llegar hasta Ushuaia y volverse a Montevideo por el lado del Atlántico.



Frieder, originario de Hannover, ingeniero informático y busquilla, había hecho varias modificaciones bastante prácticas a su camión, entre ellas el snorkel hecho en casa. Me dijo que en Alemania era prácticamente imposible conseguir uno original.

Otra de las cosas que llamaba la atención era la Yamaha que colgaba de un andamiaje movido por un tecle manual, muy simple y confiable, en la pared trasera del camión.



Les ayudé a que Eduardo les hiciera un espacio para poder cambiar un repuesto del sistema de frenos en medio de todas las obligaciones que ya había adquirido para el día siguiente, ordené todo y nos siguieron luego hasta la casa donde se estacionaron en la vereda reservada para los viajeros en camión. Cenaron con nosotros y la velada se prolongó hasta tarde; una muy agradable velada.

Al día siguiente, apenas cambiado el repuesto, los viajeros siguieron su camino. Ya nos habíamos despedido, deseándoles que tuvieran un viaje seguro y sin problemas y que pudieran ver lo lindo de Chile que alcanzaran, ojalá sin mucha prisa.

Al mediodía pasé a recoger la cámara fotográfica que había enviado a limpiar y, efectivamente, luego de quitarle unos cuantos kilos de mugre volvió a funcionar como siempre. El palo que me dieron por limpiarla no fue nada despreciable, pero al menos tenía tres meses de garantía.

Esa tarde mi única preocupación fue la de dejar todas las piezas listas para imprimar. Me urgía seguir con el camión ya que había tomado mucho tiempo la entretención de la instalación del winch. Los discos CSD hicieron su parte y los discos de lija laminada la suya, y las chispas y el óxido saltaron por los aires. Curiosamente nadie dijo nada en el taller. Será porque no me saqué nunca los tapones de los oídos?




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Antiguo 10-02-2015, 15:45:02   #1348
pairospam
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Predeterminado Re: Merkabah: de tolva a motorhome

Sábado por la mañana, y las ganas de usar la pistola de pintar arreciaban. Dispuse todo para tener la justa cuota de espacio, iluminación y ventilación y preparé el washprimer en cantidad aparentemente suficiente.

Empecé con los componentes de la caja del winch pero luego fui agregando a la tabla otras piezas que estaban esperando su turno en las cajas apiladas por doquier. También terminé de limpiar y preparar la zona receptora del injerto en el frente de la cabina y luego la rocié con tres capas de washprimer. Mejor seguro que arrepentido.





En fin, aparecieron otras piezas como los brazos de dirección, las mazas delanteras, los soportes de los pulmones de suspensión, etc. y tuve que ir esperando a que se secaran y pudieran manipular para ir cambiándolas de lado y luego esperar de nuevo para reemplazarlas por las demás piezas. Fue un trabajo lento y volátil (por el diluyente), como siempre.




Una vez todo estuvo listo, con al menos dos capas de base fosfatizante, empecé con la aplicación del imprimante. Al principio encontré solo tarros pequeños vacíos y me preocupé ya que la tienda no abriría hasta el lunes. Al final encontré un tarro de un galón lleno que había comprado hacía mucho tiempo, sepultado bajo una tonelada de tierra, telarañas, pelos de perro y polvo de esmeril. Para no tener que estar preparando a cada rato, preparé una buena cantidad de una sola vez. Error.





Fueron muchas las piezas y mucho el tiempo que me tomó imprimarlas por uno y otro lado, y la pintura catalizada no aguanta tanto tiempo como uno desearía antes de empezar a ponerse espesa, así es que tuve que botar una cantidad no despreciable, lavar la pistola en forma meticulosa y volver a preparar más imprimante. Por flojo.



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Antiguo 10-02-2015, 17:11:58   #1349
pairospam
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Predeterminado Re: Merkabah: de tolva a motorhome

Como sea, finalmente pude terminar de imprimar todo lo que podía esa tarde, y aún así me sobró un poco de imprimante que tuve que botar. Me da mucha lata tener que botar cosas pero no tenía más remedio, y se había hecho suficientemente tarde como para que estuviese cansado y cabreado.




Al ver la caja del winch lista e inmaculada en su pintura nueva me dio mucho gusto, pero luego pensé: dónde la voy a poner? Era un problema porque el volumen no era para nada despreciable y el peso por supuesto que tampoco. Además, la quería dejar cubierta para no tener que limpiarla mucho antes de aplicar la pintura de terminación y no quería tampoco que fuera pasada a llevar o que estorbara. Al final terminó sobre el chasis, en la cola, justo encima de la caja del winch trasero, convenientemente envuelta en papel, sin ninguna garantía de integridad, eso sí.





Los últimos rayos de sol iluminaban el espacio de trabajo del taller cuando me disponía a partir, raja de cansado pero contento. Mientras había estado pintando y esperando a que se secaran las piezas le di vueltas por enésima vez a cómo iba a seguir el cuento. La última vez había decidido continuar con la cabina para luego seguir con el chasis, pero ahora decidí que era mejor terminar con el chasis, dejar el camión parado y luego ocuparme con calma de la cabina. Era como obvio, pero me encanta cambiar de planes porque así parece que tengo algún control sobre cómo van las cosas.

El domingo fue otro día caluroso en el valle del Aconcagua, pero no tanto como las pasadas semanas en las que le daban a uno ganas de dispararse en la cabeza. Incluso había un par de nubes locas en el horizonte. Aproveché un rato al mediodía y partí a una picada en Campos de Ahumada a buscar queso de cabra, donde una señora que los hace muy ricos, por arriba en los cerros. Por supuesto no le quedaba ninguno a esa hora y tuve que conformarme con una Coca Cola y el placer de andar en la Africa Twin.



Más tarde, cuando la temperatura se puso más agradable, me fui a dar una vuelta en la Yamaha para rodarla un poco. Era solo una vuelta corta que se transformó en una algo mayor porque los cerros estaban demasiado invitantes y la tarde demasiado propicia. Sí… estaba solito.



El lunes entrante ya sabía que no iba a poder avanzar mucho más por la tarde ya que había olvidado un detalle importante. Tenía que fabricar un pequeño artilugio para poder colgar la caja con el winch desde el travesaño y subirlo con una cuerda y roldanas para poder apernarlo con más facilidad y seguridad a su soporte. La cosa parecía sencilla pero siempre lo parece, así que pensé que solo me alcanzaría el tiempo para eso, y tenía razón.

El método usado fue el de siempre: un bosquejo en la cabeza, patear un par de fierros del suelo para ver cuál sirve más, cortar, limpiar, soldar y listo. Usé trozos de perfil y de chasis de 5 mm, un perno usado de tapa de motor y un eslabón cortado de la cadena que se usa para asegurar las herramientas, y voilá!... un par de ganchitos suficientemente poderosos como para sostener el winch y su caja. Y llegó la hora de irse.


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Antiguo 10-02-2015, 21:39:37   #1350
Nigel Moleker Castro
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Predeterminado Re: Merkabah: de tolva a motorhome

Pairo:

Que gran trabajo que te diste con la caja del winche, la verdad es que tendrás que meterte en problemas para tener que usar el winche de vez en cuando y que justifique tanto trabajo.

¿La moto que tenía el alemán era una Yamaha TW?

Con esos neumáticos debe andar bien en arena.

Saludos

Nigel
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