Merkabah: de tolva a motorhome

[Hilux Surf-Vigo]

Pairo, el manometro de presión de aceite tiene una resistencia, cuando se quema, muere, pero es reparable.

[Alfred Chichoc]

Algún avance en este proyectazo???

Alfred

[icasale]

Empezado por pairospam

Hola y disculpen la tardanza en responder.

La módica suma eran 12 guatones por los camiones con el sistema de esparcir la sal. Si le sacaban esa cosa el camión bajaba de precio, pero no recuerdo cuánto. No tuve más noticias ni del vendedor ni de toda la gente que me contactó para ver si compraba uno de los camiones así es que de su destino no tengo la menor idea; solo espero que los traten bien.

gunvier: esa es la mejor política. Si tienes ganas el camión vendrá a ti a su debido tiempo, ni antes ni después. Lo peor es apresurarse. Mientras, busca y busca y define bien lo que quieres y cómo lo quieres.

Los trámites de importación son siempre un gran hueveo, con necesidad de agente de aduana y todo, pero debes al menos asegurarte de que los papeles de lo que importas, calcetines o motorhomes, estén en regla y cumplan con la ley famosa ésta; de ahí se parte.

Francisco: y qué pasó con el Renault?

Saludos.


Pairoa

Si a alguien le interesa uno de los Mercedes 6x6 (ex saleros) todavía está disponible

[Enzomax]

Tienes mas datos como contactar al vendedor o eres tu? Me puedes enviar info por PM?

Gracias

Enzo

[gunvier]

Empezado por icasale

Si a alguien le interesa uno de los Mercedes 6x6 (ex saleros) todavía está disponible

Estimado.
A mi también me interesa el tema de los camiones.
agradezco si me mandas la info =)

[gunvier]

Hola Pairoa, espero que todo esté bien!.

nos tienes un poco botados, que has hecho con la merkabah?, como va la reparación de la cabina?.

cuenta algo!.

Que pena lo de la africa twin... y por sobretodo, que bueno que a tu viejo no le pasó nada con el helicoptero!...

[pairospam]

Hola a todos:

Sí, esta cosa está medio botada pero yo he seguido funcionando, poco y lento, pero funcionando. Cuando encuentre tiempo traduzco las cosas y las pongo aquí.

Gracias Gunvier por las buenas ondas.

Saludos.


Pairoa

[pairospam]

Hola a todos:

Después de un tiempo considerable estamos de vuelta con el cuento de nunca acabar de la Merkabah. Poco he avanzado pero aún así hay algunos detalles que me parecen dignos de mencionar por aquí.

La última vez estaba aún convaleciente de mi dolor lumbar y había decidido trabajar solo los fines de semana para acompañar y asistir a Edison mientras trabajaba en los tapabarros y, con suerte, en otras piezas.

En el segundo piso había una serie de cajas con partes y piezas para la Merkabah, algunas de Repuesto, otras provenientes de otros variopintos donantes. Los tipos que habían hecho aseo e intentado hacer orden las habían dejado a un lado y yo necesitaba saber si habían roto o extraviado algo. Además necesitaba saber qué piezas exactamente estaban allí porque ya ni me acordaba muy bien que digamos.



Encontré un lote de cosas interesantes que ni siquiera sabía que las había recolectado. Incluso tenía una tapa para los termotatos que había encontrado por ahí, desgraciadamente mucho después de haber hecho la reconstrucción de la tapa original.




Tenía suficientes pitutos, perillas, manillas y luces como para armar dos cabinas. Los cristales de las ventanas estaban intactos e incluso encontré una cremallera buena en caso de necesitar reparar el mecanismo. Había piezas y partes del tablero y otras de distinta naturaleza. Encontré dónde estaban los componentes de la suspensión de la cabina y el gancho Rockinger. Encontré también el cableado de Repuesto; pensé que lo había perdido.







Clasifiqué y marqué todo lo encontrado, lo volví a meter en orden en cajas y las fotografié en el proceso para tener doble control y fácil acceso a la información en caso de necesitarse.

Aprovechando el vuelo recolecté algunas piezas del circuito de aire a presión que aún estaba dando vueltas por allí y lo metí todo ordenadamente en cajas en el mismo ático. Fue el caso de las válvulas de cuatro circuitos de ambos camiones que siempre estaban en medio de los pies.



El tapete del lado del piloto estaba hecho pedazos y temí que fuese difícil encontrar uno nuevo. El del lado del pasajero estaba mejor pero nunca tanto; si podía los reemplazaría ambos. Los metí a ambos a una gran caja también.

[pairospam]

Todo esto me tomó un buen tiempo, moviéndome despacito y con cuidado, sintiéndome como un anciano, pero al menos me podía mover… y la espalda resistió. Bien.

Cuando estaba en eso, Edison trabajaba sin pausa, batallando contra los microporos y las microgrietas, haciendo un trabajo finísimo con los tapabarros. Hizo el trabajo rudo con la lijadora orbital pero la parte fina a mano, sin apuro alguno.



Al día siguiente hice un pequeño viaje de prueba en la Africa Twin con Carmen, por primera vez luego de un mes más o menos. Ah… extraordinaria sensación! Mi espalda, no sana del todo aún, no se sintió tan extraordinaria, eso sí. Andar en el Montero probó ser una experiencia aún más dolorosa así es que a la pega y al taller iba a pata no más. Por fortuna San Felipe es pequeño y puedes llegar a todos lados en menos de treinta minutos de a pie.



Una semana después las cosas estaban mucho mejor y me aventuré a subir a la cabina. El tablero dio algo de batalla al principio pero no pudo resistir los embates del suscrito y, luego de una completa sesión de fotos todo el cableado fue removido sin piedad. Se puede ver el brillo del polvo sobre el lente de la cámara; había varios kilos acumulados por ahí. En realidad, esa era la cuarta cámara desde el inicio del proyecto ya que todas terminan muriendo por el polvo.





Saqué también el calefactor, cuyo ventilador tenía las aspas para la historia. El temor de no encontrar el repuesto adecuado se hizo de nuevo presente.




Trabajé un montón para limpiar el piso debajo del tapete del lado del pasajero y, una vez limpio, saqué el asiento. Quizás fue mi estado convaleciente, pero encontré que era un malditamente pesado pedazo de fierro.



Saqué también el mecanismo de bloqueo de la cabina y me encontré con que la cantidad de óxido era mucho mayor a la esperada, y obviamente no me hizo ninguna gracia.



Mi espalda aguantó bien… bueno, más o menos, así que aproveché y removí todo lo que pude. La guantera central aún contenía papeles y documentos del dueño previo del camión.

[pairospam]

Una vez saqué la caja, el túnel de motor, abollado y herido, quedó solo, mostrando todo su dolor sin distractores. Saqué la palanca de cambio y confirmé sin embargo que la base no estaba fracturada sino solamente curvada. Sería necesario usar el porta-power según Edi. Yo solo quería llorar.




Y, finalmente, Edison terminó de preparar e imprimir los tapabarros. Hizo un muy buen trabajo y las piezas lucían como nuevas. Se acuerdan cómo estaban cuando compré el camión? Lo logró tan solo un par de días antes de partir a su natal Ecuador.




Le pedí que limpiara y preparara el resto de las piezas, unas latas pequeñas que van el el aspecto interior delantero de los tapabarros a ambos lados, pero no pudimos encontrar la del lado izquierdo. Consulté el banco de fotos y, efectivamente, faltaba desde el inicio de los tiempos. Hmmm… había que ver cómo hacer, y pronto.

Como aún quedaba algo de tiempo para trabajar en esa calurosa tarde de sábado, saqué el asiento del conductor. Más pesado y difícil de manejar, igual no le ganó a Pairoa y, sin dolor ni pena, quedó puesto en el suelo junto a todas las piezas de su propia suspensión, rotas quién sabe desde hacía cuántos siglos atrás.



Antes de partir hice un par de fotos de la cabina en su avanzado estado de empelotamiento. Yo estaba muy feliz, aunque la cabina no lo parecía tanto.



Al día siguiente hice una prueba de manejo en el Montero con mejores resultados para mi columna. Fuimos a dar una vuelta con Carmen y los perros al campo, después de varias semanas. Pasé por el corral a buscar el tapabarros de Repuesto para tener material para fabricar el pequeño guardafangos interno que faltaba y, adivinen qué encontré… sí, el mismo pedazo de lata, esperando aquel preciso instante desde hacía casi tres años. El Jefe los oye, incluso en los pequeños detalles, no lo olviden.



Al lunes siguiente llegué al taller por la tarde llevando la pieza conmigo. Estaba muy feliz con ese pequeño detalle, no sé por qué, pero feliz.




Me puse el overall y monté en la cabina de nuevo. Saqué el resto de los tapetes del piso y del túnel del motor y limpié todo. No mucho óxido. Bien.



Entonces me fijé en las lunetas traseras, sin saber muy bien cómo sacarlas. Le di un pequeño empujón a una y el perfil de goma se desprendió fácilmente. La primera de las lunetas se demoró cinco minutos en salir; la segunda menos de dos. Perfecto.