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Antiguo 20-01-2014, 08:58:50   #2
Pelao Daza
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Smile Re: Periplos de una Odisea.

Hicimos una fogata, fuimos a ver los dos aludes para tener claro que posibilidades teníamos de salir, el que estaba hacia abajo de nosotros era grande, se podía pasar si dejaba de llover y después de algunas horas para que el material se endureciera. Caminamos hacia el reten para ver el otro aluvión, iba filmando y cuando llegue sentí algo extraño, me quede mudo y sentí que eramos afortunados .. simplemente atemorizante aquellas imágenes, solo pensar que podríamos estar cruzando justo en el momento me invadio una tremenda angustia .. me sentí insignificante y me dieron ganas de llorar .. sin duda me sentí mas que afortunado de volver (no sabia cuando) a mi casa, fue un momento especial donde agradecer por estar vivio era sin duda un sentimiento general de todos los que ahí estábamos.

En el campamento improvisamos con una lata un secador de ropa, calentamos agua, tomamos mate y conversamos mucho, pensamos en quienes se habían quedado en la Laguna, también en quienes estaban aislados en la frontera. Conversamos mucho y mediante eso nos fuimos apoyando.

Antes de oscurecer apareció el suboficial mayor de el reten de Pichuante, cruzo con dificultad la quebrada pero sin mayor peligro, bajada agua pero no era peligroso cruzar. Llego a nuestra orilla, anoto datos de patentes y nombres, luego con la ayuda de unos arrieros y sus lazos logro cruzar el otro aluvión con el barro hasta la cintura, la misión era llamar por radio e informar que no teníamos desgracias que lamentar entre los que ahi estábamos.

Ya casi de noche llego una persona de la municipalidad de Romeral, venia a ayudar y ver que necesitábamos, amablemente ofrecio llevar a quienes estaban con nosotros, mujeres y niños .. se quedaron con nosotros Jorge, su cuñado y su sobrino quienes iban a dormir en la camioneta.

Nos informaba que al otro dia venia una maquina para habilitar el camino, que mas abajo de nosotros habían 3 aludes mas pero que eran mas pequeños. Teniamos al menos la esperanza de que a mas tardar el Domingo a la 14 horas podríamos estar bajando.

Mientras fueron a dejar a la camioneta a las mujeres y los niños nosotros pusimos el disco, había que comer para reponer fuerzas, la conversación sin duda estaba centrada en lo ocurrido, ya con mas tiempo hay mejores análisis y conclusiones.

Creo que muchas cosas se me escapan, el vivir una experiencia asi sin duda no es normal, pero nos toco vivirla y podemos contarla, por ese solo hecho estoy muy agradecido.
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