Que lata que pasen estas cosas, y mas aun cuando es una mujer la victima de este pelafustan.
Al final terminamos comprando herramientas y dedicando nuestro tiempo a arreglar nosotros mismos los vehiculos, porque el riesgo de que te caguen en cualquier taller es demasiado grande. Lamentablemente en este pais estamos a merced de los delincuentes.
Hoy, despues de lidiar 2 meses con el sistema de inyeccion de mi auto, logre finalmente repararlo!, y quedo como avion!