[Curricon]

Bitácora 15

Continuación

que frenar rápido o mantener una velocidad muy lenta. Las autopistas no están en
buen estado, se aprecia el deterioro del asfalto producto del sobrepeso de los
camiones, muchos eventos o baches hacen sufrir los amortiguadores y las
lombadas o lomas de toro aparecen en los lugares mas insólitos.

La mañana que iniciamos ruta hacia Florianópolis era lluviosa, lo que ponía un
condimento especial a la travesía. Acordamos comenzar el ingreso a Florinapolis a
una hora prudente porque sabíamos que nos esperaba un puñado de autopistas
mas enredadas que pelea de pulpo. El punto trazado en Maps.me (gran invento)
era en Isla Santa Catarina pero no estábamos seguros de encontrarlo abierto por lo
cual teníamos que estar preparados. Yo fui abriendo ruta, mucha autopista, con
camiones circulando cual estampida de elefantes, algunos sin miramiento tiraban
las volquetas a los autos mas pequeños y las motos cual kamikazes te adelantaban
por cualquier parte… con todos los sentidos atentos, Karen y yo decidíamos por
donde doblar intentando que no nos pasara lo de Potosí, Carlos comunicándose
por radio con nosotros avisándonos de cualquier peligro que veía…¡¡sin duda fue
un muy buen trabajo en equipo¡¡. El camino indicado por maps.me nos llevaba por
una ruta angosta y de curvas muy cerradas, con cables bastante bajos lo que nos
volvía a poner en jaque…. Afortunadamente salimos sin problemas pero no
encontrábamos un lugar adecuado y la noche ya llegaba, aplicamos plan B y
decidimos preguntar en una Petrobras, con tanta suerte que el que atendía era
argentino y no tuvimos que practicar el portuñol que aun no dominamos del todo.
Así llegamos a Camping Rio Vermelho, que es municipal y está en perfectas
condiciones (incluso tenía para descargar aguas negras)… al vernos estacionados
nos vino el relajo total… ¡¡no íbamos a mover los camiones¡¡ así que arrendamos un
auto para recorrer al día siguiente la isla.

Florianópolis e Isla Santa Catarina es bastante grande, razón por lo cual decidimos
recorrer algunos puntos entre ellos el sector de los ingleses, el mercado municipal,
la catedral, ¡¡almorzamos en el mercado un buen plato de mariscos¡¡ etc. El día se
nos pasó volando y ya teníamos que regresar para devolver al auto, el balance al
término del día fue que pese a que es una ciudad muy turística y bella, nos
quedábamos con la amplitud, comodidad y tranquilidad que vivimos en las playas
de Cidreira.

La mañana siguiente era 1 de Mayo y lo estábamos celebrando como ios manda…
¡¡descansando¡¡… decidimos comenzar a rodar porque al ser fin de semana largo se
complicaría el tráfico. La ruta seguía por Camboriú pero decidimos no pasar
porque en los peajes veíamos la congestión para ingresar y desde lejos se
apreciaba la dificultad de sus calles. Seguimos rumbo a Penha para ver si
encontrábamos algún acceso a playa donde poder alojar, pero no encontramos
nada, seguimos y dormimos cerca de ensenada.

Los últimos días de ruta habían sido complejos, porque al intentar ingresar a las
playas, teníamos que meternos por calles muy estrechas, sin tener punto seguro
donde quedarnos, perdiendo tiempo con luz día que es primordial y regla de oro
en la circulación en Brasil. Por estos motivos decidimos no ingresar a ninguna
playa a menos que tuviéramos ubicación de GPS de campings (Ioverlanders). Así
fue que nos dirigimos a Itanhaem a encontrar el Camping Club Brasil. Al ingreso te