Re: Pedernal - Viaje Patrimonial
Seguimos por la segunda parte.
Putaendo tiene muchos atractivos, un lugar muy cerca de Santiago que encierra en sus historias mucho pasado, glorioso muchas veces, quien por ejemplo sabe que en esas tierras existe artesania a crochet ?? verdaderas obras de artes que en el comun de la gente no existe como informacion, a veces me pregunto .. que pasa con lo trascendental de los pueblos y su gente ?? que pasa que no se promociona el sentido patrimonial de las cosas que sin duda el solo mirarlas ya tiene valor ??pues bien la intencion no solo era un viaje, si no que este viaje fuese un viaje con sentido, bajarse del auto, caminar por sus calles, saludar a su gente .. desdeun vehiculo vemos a razon de la velocidad que vamos el lugar, perdemos entonces la perspectiva de ver desde otro nivel su riqueza, nos falta lo simple, aquello que por la velocidad que vivimos perdemos de vista y no es perder el tiempo como piensan muchas personas otras encontraran que no es muy atractivo, pues razones tendran para no apreciar el valor de un sector que tiene mucha hoitoria y que al comprender que eso ha sido el pilar de una sociedad perdida en el tiempo me llena particularmente de razon de vida. Teniamos planeados visitar un Cristo que esta emplazado en una zona de rocas, no llegamos a destino por falta de mejor informacion lo que me motiva tener mas informacion precisa para no perder tiempo buscando el sector.
Seguimos entonces viaje al sector del Tartaro, un enclave por donde paso el Ejercito Libertador ya que venia desde Resguardo de los patos y es paso obligado en le cajon del rio Putaendo. A estas alturas en algunos lugares ya hay signos muy visibles de sequia. Subiendo la cuesta llegamos a sectores donde lo principal es la crianza de caprinos donde podemos divisar corrales en distintos sectores, pasamos por un pequeño valle donde el paisaje se nota mas desertico, principalmente espinos y donde el lomaje nos permite ver diferentes horizontes. Llegamos entonces al cruce de Alicahue, camino publico que en alguna oportunidad pusieron un porton con llave y que en el tiempo no se pudo sustentar ya que este camino es publico y de libre acceso. Pasamos al sector de las tierras rojas, material que los lugareños extraen ya que tiene propiedas muy parecidas a la greda. Mas adelante hacemos una parada en una ruta clasica, una grieta que ha desafiado a mas de algun jeepero, ruta que requiere de 4x4 muy bien preparados y de pilotos que saben a que se exponen, algunas fotos y continuar el viaje hasta llegar al portezuelo donde tenemos la oportunidad de pareciar dos valles a la misma vez. Desde aqui comenzamos a bajar hacia las mostazas, estacion pluviometrica muy antigua y que tiene cerrado el paso para el comun de los mortales, seria interesante poder visitarla y ver el tipo de instrumentos alli puestos.
El camino sin duda con una mantencion que nunca vi desde los años que hago esta ruta, espectacular ya que el tiempo de viaje se acorta y los vehiculos sufren menos, poco tiempo y llegamos a las casas patronales de la ex-hacienda Alicahue, un gran valle muy productivo y que pertenecio a la familia Silva Somarriva, algunas fotos y escapando del calor cobijandonos bajo la sombra de una pimiento. De ahi hasta el portezuelo entre el valle de Alicahue y el valle del Sobrante, a lo lejos se ven las plataciones de citricos y paltos, que necesario para el hombre muchas veces es advertir la inmesidad, adertir que estamos y somos parte de un mundo que en extension a veces somos incapaces de atrapar con una sola mirada. Bajamos entonces hacia el valle, insisto, todo muy seco. Ya retomando el pavimento viramos hacia la derecha frente a una gran gruta hacia las antigua casa de la Hacienda El Sobrante, el calor a esa hora ya se hacia muy presente, buscabamos alguna sombra para poder capearlo, la casa patronal completamente restaurada, algunos encontraban extraña su arquitectura, con dos pisos y una gran galeria en el segundo piso, al lado de esta esta la capilla. Al acercarnos nos damos cuenta que no es de piedra como una puede apreciar a lo lejos, esta cubierta con latas con la tecnica del repujado que asemeja la textura y forma de la piedra. Varias fotos y conversando con personas del sector nos comentan que despues de haber pertenecido al refugio (nos imaginamos una especie de internado) todo el lugar lo habia comprado un señor de Valparaiso de apellido Diez y que el posteriormente habia vendido a la familia originaria dueña de la hacienda, los Alamos.
Seguimos entonces nuestro viaje hacia Chincolco para dirigirnos a Petorca y almorzar en el Valsof, donde la comida criolla es lo atractivo.
Ya en Petorca visitamos su plaza y apreciamos su Iglesia, la sombra de los vetustos arboles de la plaza nos entregan una delicada sombra que al fragor de una leve brisa nos hacen sentir menos calor.
Y vino la hora del almuerzo, buenos platos y buena conversacion en la mesa.
Luego desde Petorca a Pedernales
|